En estos tiempos donde la diversidad racial es uno de los objetivos prioritarios de muchos ejecutivos televisivos, la fórmula mágica la ha obtenido ‘El ferrocarril subterráneo’ con la adaptación de una novela ganadora del premio Pulitzer, dirigida por un director oscarizado y que trata de la red clandestina de liberación de esclavos que operaba a mediados del S. XIX, desde la perspectiva de un autor y un director negro.
La apuesta era arriesgada puesto que la novela escrita por Colson Whitehead presentaba bastantes aspectos oníricos e incluso fantásticos que no tenían una fácil traslación en imágenes, pero Barry Jenkins la ha llevado a su terreno, buscando una estética y unas imágenes impactantes para mostrarnos diversos aspectos del calvario de los esclavos negros en diversos estados de los EEUU.
No es una serie complaciente y en determinados momentos su visionado puede ser bastante duro, no porque las imágenes sean explícitas, sino por lo que insinúan o dejan entrever que puede ser mucho más efectivo para mostrar esas atrocidades.
Ficha: El Ferrocarril Subterráneo/ The Underground Railroad 10 ep 60m May 2021- Cadena: Amazon (USA)-Amazon (E)
Sinopsis: Cora es una joven esclava en una plantación del estado de Georgia que no tiene mayor futuro que recoger algodón y procrear niños para seguir manteniendo la mano de obra barata para el dueño de la plantación.
La llegada de un esclavo bastante rebelde Caesar, le introduce el gusanillo para escaparse de ese lugar cuando encuentren el momento más oportuno, con la esperanza de poder alcanzar alguna de las estaciones del clandestino ferrocarril subterráneo que conduce a los esclavos hacia Canadá y la libertad.
Ambos consiguen fugarse de la plantación, pero empiezan a ser perseguidos de forma implacable por un cazaesclavos, Ridgeway, que no va a cejar en su misión de encontrar a los fugados y retornarlos al redil de la plantación para ser duramente castigados o incluso ejecutados dependiendo del humor del dueño.
Ese viaje de Cora y los intentos de Ridgeway para atraparla son el eje vertebral de ‘El Ferrocarril Subterráneo’
El inicio: Colson Whitehead se ha convertido en uno de los escritores más importantes de los EEUU desde su debut en 1999 con la novela ‘ La Intuicionista’ hasta llegar a su consagración con ‘El Ferrocarril Subterráneo’, publicada en 2016.
Su edición tuvo el respaldo casi inmediato de dos enormes personalidades como Oprah Winfrey y Barack Obama que dispararon sus ventas y lo catapultaron al Premio Pulitzer de ese año, algo que ha repetido el año pasado con ‘The Nickel Boys’ un hecho excepcional al ganar dos Pulitzer en apenas cuatro años.
Una de las primeras personas en leer el libro de ‘El Ferrocarril Subterráneo’ antes de ser publicado fue el director Barry Jenkins, que había acabado de rodar ‘Moonlight’ por la que ganaría el Oscar al año siguiente. Jenkins quedó completamente obsesionado con la historia y buscó rápidamente una reunión con Colson Whitehead para comprarle los derechos de la adaptación televisiva del libro y convencerle que por su trayectoria era la persona adecuada para realizar la miniserie.
Dos genios se suelen entender rápidamente, por lo que se pusieron manos a la obra conjuntamente, ambos en calidad de productores ejecutivos, pero con Barry Jenkins como showrunner y dirigiendo todos los episodios, con el apoyo de la productora de Brad Pitt, ‘Plan B’ para tener más musculo financiero e industrial.
La batalla por los derechos de ese caramelo televisivo se la llevo Amazon que puso a disposición de Barry Jenkins, un generoso presupuesto para poder recrear incluso las fantasías ferroviarias de la novela que eran de difícil reproducción en la pantalla.
Su estreno se produjo en mayo de este año, con todos los episodios a disposición del espectador en Amazon, una estrategia que en este caso tengo la sensación que le ha perjudicado. Su estructura no es ideal para ser devorada compulsivamente por la dureza y la crudeza del relato que exige una cierta oxigenación y digestión entre episodio y episodio, como pueden intuir a partir del tráiler original de la serie.
La trama: ‘El Ferrocarril Subterráneo’ tiene una estructura televisiva algo desconcertante puesto que a pesar de tener oficialmente diez episodios, de hecho la historia principal de la fuga de Cora se desarrolla en siete episodios de una hora de duración con un epílogo final un poco más largo.
El resto son dos episodios independientes de corta duración ( el cuarto y el séptimo ) que desarrollan historias marginales de dos personajes de la historia, que en otras circunstancias pretéritas se habrían incluido como episodios extras en el DVD de turno.
Es conveniente empezar con este aviso para dejar claro que ‘El Ferrocarril Subterráneo’ no es una serie al uso, ya que además de esa complicada estructura narrativa tiene bastantes elementos fantásticos que plasman las ideas de la novela, pero que para algunas personas pueden ser un cierto impedimento para entrar en esa historia al no corresponderse con veracidad a los hechos históricos, dejando volar la imaginación en bastantes ocasiones.
Los episodios de ‘El Ferrocarril Subterráneo’ llevan el nombre del estado en el que se encuentra Cora en el transcurso de su huida empezando por el de la plantación de Georgia de donde huye y nos muestran los diferentes horrores que va a ir conociendo en su camino, desde experimentos genéticos con los negros como cobayas, hasta lugares donde está prohibida la presencia de negros, pasando por masacres indiscriminadas.
Esas historias particulares de cada estado son autoconclusivas y permiten la presencia de invitados especiales de cierto renombre para hacer de apoyo o de enemigo de Cora, con caras conocidas como Megan Boone ( The Blacklist), Lily Rabe ( American Horror Story) o el ubicuo australiano Damon Herriman ( Justified, Mr Inbetween) interaccionando con la esclava huida de diferentes maneras.
Cada episodio hace un salto temporal y de ubicación sin mostrar los pormenores del viaje que realiza a través de ese onírico ferrocarril subterráneo que la traslada de un lugar a otro, como si fuera una especie de libro de historia de la esclavitud como muestra el siguiente video.
El viaje es durísimo y repleto de escenas que buscan revolver las tripas al ver las atrocidades que unas personas cometían contra sus semejantes por razones exclusivas de raza, justificándolo con excusas peregrinas casi siempre de origen religioso.
A pesar de todas esas virtudes, el resultado final adolece de una cierta fragilidad tanto por esa estructura extraña de episodios cortos intercalados entre la historia central, como por una excesiva parsimonia en el desarrollo de la historia con un Barry Jenkins encantado de buscar los mejores planos y la fotografía más exquisita, para rellenar horas y horas de metraje sin mucha más sustancia narrativa que esa persecución incesante del cazador de esclavos Ridgeway hacia la pobre Cora.
A pesar de gustarme bastante y resultarme estimulante lo que estaba viendo, un montaje algo más ágil habría sido más eficiente en lugar de recrearse en las miserias de la pobre Cora en su viaje hacia la libertad, como dejan entrever en una de las promociones de la serie.
En este caso tengo muy claro que una emisión semanal habría aumentado mucho su visibilidad al poder debatir cada uno de los episodios históricos que desarrolla, en lugar de quedar sepultados en un maratón de un fin de semana que se olvida la semana siguiente.
Desde el punto de vista histórico me ha hecho incluso añorar algo, ‘Underground’, una gran serie maldita e inédita por estos lares, y creada por Misha Green (Territorio Lovecraft). La serie trata del mismo ferrocarril subterráneo, de una manera más histórica y con uno de los episodios mas subyugantes de los últimos años, un monologo de 45m de la gran activista Harriet Tubman, que por cierto ni es mencionada en ‘El Ferrocarril Subterráneo’, cuando fue una de sus principales valedoras.
A pesar de esas pequeñas reticencias ‘El Ferrocarril Subterráneo’ me ha parecido una miniserie bastante buena y estimulante desde el punto de vista visual y no deja de ser una gran opción si están buscando algo diferente a sus historias habituales.
Los actores: Mi primera sorpresa fue encontrarme como protagonista a la joven actriz sudafricana Theso Mdebu como Cora, la protagonista absoluta de la historia, más que nada porque la conocía de un gran papel en la serie sudafricana IsThunzi, donde interpretaba a Winnie, la lider de un grupo autodenominado como las ‘ninjas’, donde era una chica con grandes aspiraciones que ve cercenadas al ser enviada a vivir con su tía a una zona rural de la provincia de Natal.
IsThunzi arrasó en los países del África austral y Theso Mdebu se convirtió en una gran estrella en Sudáfrica de la noche a la mañana, al ser nominada como mejor actriz en los Emmy Internacionales de 2017. Mientras estaba en Nueva York, su agente le comentó la posibilidad de hacer una audición para el papel de Cora, que convenció casi desde el primer momento a Barry Jenkins, aunque tuvo que pulir temas como el acento y otros detalles en su debut en la televisión estadounidense
Mdebu está conmovedora como Cora, combinando su enorme fragilidad aparente con una fuerza interior enorme, que la impele a seguir huyendo y a levantarse cada vez que se cae, para poder cumplir su sueño que no es otro que plantar unas semillas de okra en el lugar donde pueda sentirse liberada por primera vez, como símbolo del inicio de una nueva fase de su vida.
El implacable dúo perseguidor está formado por Joel Edgerton como el malvado Ridgeway, acompañado por la otra gran revelación de la serie, el pequeñajo Chase W. Dillon que está impresionante como Homer el fiel acompañante de Ridgeway, un niño negro que se comporta absolutamente como un adulto y que es la mano derecha de su jefe e incluso más despiadado si cabe con los esclavos.
El australiano Joel Edgerton ha tenido una carrera habitual en los actores de ese país empezando en sus series locales con éxitos como ‘The Secret Life of us’ para dar el salto a Hollywood con el papel de Owen Lars, el hermanastro del joven Anakin Skywalker en los episodios 2 y 3 de ‘Star Wars’.
Sin estar mal, su actuación es algo más plana y está algo por debajo de sus dos compañeros y en especial del joven Chase W. Dillon que le roba absolutamente todas las escenas, tanto es así que a veces me preguntaba si no era un actor adulto enano, por su manera de moverse y de gesticular.
Epílogo: No se extrañen si ven a ‘El Ferrocarril Subterráneo’ en las listas de nominaciones en el apartado de miniseries, porque tanto los nombres involucrados en ella como esa temática, son ideales para concederles reconocimientos de todo tipo, por lo que no pierdan la oportunidad de verla en Amazon que la ha publicitado con el siguiente tráiler para su estreno en España.
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Lorenzo Mejino