La recuperación de grandes éxitos televisivos para hacer nuevas versiones actualizadas es una buena estrategia para intentar jugar sobre seguro con el riesgo inherente de defraudar los recuerdos de la versión original. Por suerte la nueva versión de ‘Shogun’ se ha convertido en un verdadero éxito de masas con unas audiencias que hacía tiempo que no se veían en una cadena de cable estadounidense.
Las renovadas aventuras del marinero pirata Jack Blackthorne en el Japón feudal de los samuráis del S XVI han conseguido encandilar a todos los espectadores a pesar de estar mayoritariamente hablada en japonés sorteando la alergia de muchos espectadores hacía el subtitulado en especial en los EEUU.
La excepcional interpretación de los actores y actrices japoneses de ‘Shogun’ la ha convertido en una de las principales favoritas para arrasar en la temporada de premios televisivos de 2024, como vamos a analizar a continuación.
Ficha: Shogun 10 episodios 60m feb-abr 2024- Cadena: FX( USA)- Disney+ (E)
Sinopsis: Jack Blackthorne es un experimentado marinero británico enrolado como piloto en un barco mercante holandés que ve como su barco Erasmus, embarranca en el mar de Japón tras un sufrir un tifón cerca de la costa japonesa. Tras conseguir legar a la orilla, es capturado por unos samuráis.
Su religión protestante no le hace ganar amigos entre los católicos portugueses que controlan el comercio y las relaciones con los señores feudales japoneses
Su suerte cambia cuando conoce al influyente general japonés Toranaga, con el que comparte su odio hacia la expansión de la fe católica en Japón. Toranaga lo acoge en su corte como asesor especial y le asigna como traductora de inglés a japonés a Mariko, una joven mujer casada.
En paralelo, Blackthorne va a ser pieza clave en la ascensión de Toranaga dentro del imperio japonés en busca de alcanzar el grado de Shogun, o gobernador militar, el máximo al que puede aspirar un general.
El inicio: James Clavell era un hijo de militar que fue capturado durante la II Guerra Mundial y enviado durante tres años a un campo de concentración japones en Singapur, donde las pasó canutas durante su cautiverio.
Enamorado de la cultura asiática se estableció durante un tiempo en Hong Kong, antes de trasladarse a Hollywood para intentar entrar en la industria cinematográfica, donde empezó de guionista de películas como “La Mosca” para acabar haciendo de ejecutivo de un estudio cinematográfico.
En paralelo Clavell empezó a escribir una novela basada en su penosa experiencia como prisionero de los japoneses, que publicó en 1962, que le sirvió de experiencia para su gran novela de ficción, Shogun, que publicó en 1975 y que se convirtió en un gran bestseller de la época, siendo llevada a la pequeña pantalla en 1980, en formato de miniserie con el mismo título de ‘Shogun’ protagonizada por Richard Chamberlain y Toshiro Mifune.
La miniserie tuvo un éxito brutal rememorando el que tuvo ‘Raices’ tres años antes y dejó un recuerdo imborrable durante muchas décadas, hasta que en el año 2018 la cadena FX anunció que había conseguido los derechos para una nueva versión de ‘Shogun’ al comprarlos por una suma más que generosa a la heredera del autor Michaela Clavell.
La primera opción para escribir la nueva versión fue el norirlandés Ronan Bennett creador de la exitosa serie de gangsters ‘Top Boy’ pero su primer tratamiento no convenció a los productores y fue despedido del proyecto.
Los nuevos encargados de la adaptación fueron el matrimonio formado por Justin Marks y Rachel Kondo, en el que Marks aportaba su gran experiencia como guionista de películas como ‘Top Gun: Maverick’ y de la interesante miniserie ‘Counterpart’. Por su parte, su mujer Rachel Kondo aportaba su ascendencia japonesa y su experiencia como novelista.
El nuevo equipo empezó a trabajar documentándose de forma exhaustiva sobre ese periodo convulso de la llegada de extranjeros a la hermética corte japonesa y contaron con la colaboración de Hiroyuki Sanada que ademas de protagonizar la serie, era el productor ejecutivo y se erigió en el garante de la autenticidad japonesa de la nueva versión de ‘Shogun’ .
Para el rodaje se construyó una replica de un poblado japonés cercana a Vancouver, pero la pandemia complicó enormemente el rodaje derivando en un presupuesto astronómico para conseguir el máximo realismo posible.
En esta fase todos los responsables estuvieron de acuerdo en respetar el japonés como principal lengua vehicular, pero a diferencia del original, todos los diálogos iban a estar subtitulados en ingles, para mejorar la información del espectador, a diferencia del original en que prefirieron que nos pusiéramos en el lugar del marinero británico, al no entender ni jota de lo que hablaban en japonés.
Tras un largo periodo de posproducción ‘Shogun’ se estrenó este mes de febrero despertando todo tipo de elogios y grandes críticas desde el primer momento en que mostraron el espectacular tráiler promocional.
La trama:
‘Shogun’ es el relato de la lucha por la sucesión entre diferentes señores feudales japoneses que se ha desatado tras la muerte del actual Taiko que era el regente que controlaba con mano férrea el imperio nipón.
El sucesor debería salir del consejo de regentes formado por cinco señores feudales en el que rápidamente se forman dos facciones irreconciliables dirigidas por el señor Toranaga y el señor Ishido, con los restantes tres decantándose inicialmente hacia Ishido, más por miedo que por convencimiento.
En ese juego de poderes tenemos también a la maquiavélica Lady Oshida, la viuda del fallecido Taiko y madre del único heredero que dejó, que será el futuro emperador cuando cumpla la mayoría de edad.
A un segundo nivel tenemos la enorme influencia de los católicos portugueses en el imperio nipón tanto a nivel religioso como comercial, con los monjes que han conseguido convertir al catolicismo a dos de los cinco regentes, además de copar todas las rutas comerciales que les proporcionan enormes beneficios e influencia, como pueden en el video que daba una primera impresión de ‘Shogun’.
La llegada de Jack Blackthorne amenaza directamente con romper ese precario equilibrio tanto entre los nipones y los portugueses como entre las alianzas de los cinco regentes.
Ese proceso es muy paulatino y se inicia con la llegada a las costas japonesas de Blackthorne y su tripulación, exhaustos y a punto de fallecer. Sus primeros contactos están completamente mediatizados por su incapacidad de entenderse con los japoneses, lo que le provoca un enorme sentimiento de frustración.
Su suerte empezó a cambiar con la presencia de Mariko, encargada de hacer de puente lingüístico japonés-inglés, al haber aprendido la lengua de un monje católico portugués durante su juventud, aunque hay que avisar que los creadores han pegado el cambiazo portugués-inglés sin muchas explicaciones.
Esa capacidad de hacerse entender gracias a Mariko, hace que Jack Blackthorne consiga convencer al señor feudal Toranaga de su gran capacidad militar utilizando los cañones de su barco para darle una potencia y precisión de fuego de la que carecen sus rivales del consejo de regentes.
Poco a poco Blackthorne se va convirtiendo en una persona de la máxima confianza de Toranaga, lo que no deja de levantar ampollas entre el resto de su corte, empezando por sus propios hijos y especialmente con Yabusage el señor de Izu, que sirve fielmente a Toranaga pero con sus propias aspiraciones personales.
El preciosismo de ‘Shogun’ se refleja desde los mismo títulos de crédito, una verdadera obra artística que pueden disfrutar en el siguiente video.
El contraste entre las maneras rudas y poco refinadas de Blackthorne con las rígidas normas de comportamiento de la sociedad japonesa, provocan numerosos equívocos y roces que suelen ser solventados gracias a los buenos oficios de Mariko que se convierte en un verdadero ángel de la guarda del inglés, despertando enormes recelos de su marido Butsaro, un venerado guerrero.
Los tres ejes principales de ‘Shogun’ corresponden en primer lugar a la relación entre Toranaga y Blackthorne, en segundo lugar la que se forma entre Blackthorne y Mariko y por último las luchas de poder en la corte de Osaka entre Toranaga y el resto de regentes.
Un buen ejemplo de la relación principal entre Toranaga y Blackthorne la pueden ver en el siguiente video ilustrativo de sus dificultades para entenderse.
La evolución está llena de asesinatos, ‘seppukus’, batallas, traiciones y alianzas de todo tipo que hacen que las balanzas de poder se vayan alterando continuamente en un maravilloso juego de ajedrez para convertirse en el nuevo ‘Shogun’ o gobernador militar para dominar Japón.
Lo primero que llama la atención de ‘Shogun’ es la primorosa autenticidad de la recreación de las aldeas y palacios japoneses como explican en el siguiente corte sus responsables.
En ‘Shogun’ todo está cuidado hasta el más mínimo detalle empezando por el vestuario de la época con preciosistas kimonos para las mujeres y unos elaborados trajes de guerreros samuráis de la forma que explican en el siguiente corte.
A pesar del enorme gran recuerdo que tenía del ‘Shogun’ original de Richard Chamberlain, la nueva versión es una verdadera maravilla en todos los sentidos, bastante más realista que el original que ha envejecido bastante mal.
Las diferentes historias atrapan desde el principio con numerosos giros y sorpresas que desembocan en un impresionante desenlace final donde prefieren que el espectador pueda deducir fácilmente el destino final de esas luchas palaciegas en lugar de recrear una batalla épica para hacerlo más explicito.
En mi caso, debo reconocer que al haber vivido un año en Japón y haber visto bastantes series históricas japonesas y coreanas situadas en esos periodos concretos, jugaba con cierta ventaja al conocer muchas de esas rígidas reglas de la sociedad japonesa, incluyendo las diferentes formas y expresiones de hablar japonés de hombres y mujeres, que no son tan fáciles de reconocer a simple oído .
Sorprendemente y a pesar de ser una historia cerrada, la cadena FX acaba de anunciar su renovación para una 2T y 3T, donde tendrán que escribir material inédito para continuar con las aventuras de Blackthorne y Toranaga más allá de la imaginación del libro de James Clavell.
Los actores:
Hiroyuki Sanada ha sido el heredero natural de su predecesor en ‘Shogun’, Toshiro Mifune, al convertirse en el actor japonés mas solicitado en Hollywood. Sanada empezó como experto en cine de acción y artes marciales en muchas producciones de Hong Kong junto a su gran amigo Jackie Chan.
Poco a poco fue derivando hacia papeles más dramáticos acaparando casi todos los papeles de japoneses en las superproducciones de Hollywood como ‘El último Samurái’ y franquicias como ‘Los Vengadores’ o ‘John Wick’, así como en series como ‘Perdidos’, ‘Helix’ o ‘Extant’.
El propio Sanada ha reconocido que ‘Shogun’ ha sido el proyecto más importante de su vida y como productor ejecutivo tenía cierto miedo de la reacción japonesa al ver la serie, recordando las enormes críticas japonesas que tuvo la versión original por occidentalizar demasiado la trama.
Por suerte Sanada ha sido aclamado en Japón y en el resto del mundo en especial por su impresionante interpretación, trasmitiendo toda la solemnidad y gravitas del gran señor feudal japonés que es Toranaga, como explica el propio actor en este video de un día en el rodaje.
El eslabón más débil de todo el reparto de ‘Shogun’ me ha parecido la arriesgada elección de Cosmo Jarvis para el papel capital de Jack Blackthorne. Al haber realizado casi toda su carrera en el cine ( Lady Macbeth) lo cierto es que no le conocía apenas a pesar de haber estado en la 5T de ‘Peaky Blinders’ como un trastornado francotirador.
Su interpretación me ha parecido demasiado agarrotada y sin demasiada expresividad en un tono garrulo que contrasta mucho con el gran refinamiento del resto del reparto japonés. Jarvis cumple correctamente pero siempre que lo veía no dejaba de pensar en que otro actor lo podría haber hecho mejor y al final me he quedado con esa sensación.
En cambio los cielos se abren completamente para adorar la interpretación de Anna Sawai como la traductora Mariko. Nacida en Nueva Zelanda de padres japoneses, Sawai se trasladó a vivir a Japón a los diez años para empezar su carrera artística como miembro de grupos musicales femeninos como ARA y sobre todo Faky.
Tras varios años como cantante se pasó a la interpretación en 2019, destacando en un gran personaje como la hija de un jefe de la Yakuza en la gran serie británica ‘Giri/Haji’
Su carrera ha ido en ascenso, gracias a su bilingüismo inglés-japones, apareciendo en grandes series como ‘Pachinko’ o ‘ Monarch, Legacy of Monsters’, siempre a un gran nivel pero nada comparable a su impresionante interpretación del complejo personaje de Mariko, una mujer atormentada y completamente marcada por su pasado del que no sabe como escapar por su sentido del honor y su dignidad.
Por último mencionar a Tadanobu Asano el gran robaescenas de ‘Shogun’ con su gran interpretación del maquiavélico señor Yakusabe, que a pesar de rendir pleitesía a Toranaga va cambiando más de chaqueta que algún diputado de Ciudadanos, todo ello de una forma bastante imprevisible y con el comportamiento menos japonés y más expresivo de toda la corte imperial.
Asano es un actor muy popular en Japón por sus numerosas películas y series tan buenas como ‘The Long Goodbye’, donde interpretaba a una especie de Raymond Chandler nipón, pero apenas conocido fuera de su país, aunque de vez en cuando tenía papeles secundarios como un guerrero japonés en franquicias como ‘Thor’ o ‘Mortal Combat’, pero su Yabusage le va a permitir subir a otro nivel de popularidad mundial
Final:
Si le gustan las intrigas palaciegas en un ambiente tan exótico y remoto como el Japón del S XVI, pocas cosas van a encontrar mejores que ‘Shogun’ un verdadero placer para el seriéfilo exigente, siempre y cuando no sea alérgico al subtitulado, porque doblada perdería absolutamente toda la gracia, al no tener esa incomprensión lingüística.
Para finalizar el artículo, les voy a dejar con un ultimo video sobre la búsqueda de la autenticidad en todos los aspectos de ‘Shogun’.
Esperamos sus opiniones y comentarios, aquí o en nuestra cuenta de twitter (@lmejino). Hasta la próxima
Lorenzo Mejino