Así que será un peqeuño repaso a lo que yo he elegido como productos de la Feria.
En jamones (que los hay y muy variados) mi ganador sigue siendo la Dehesa de Extremadura con la representación de Carlos Tristancho, el ex-actor casado con “la Bosé” como dice él mismo (aunque la sigue presentando como su novia) que se dedica con toda su alma a su tierra extremeña. No sólo hizo esa maravilla de hotel que es Rocamador sino que, además, se propuso sacar adelante todos los productos de calidad a través de la marca País de Quercus. Nos habla, además de sus gustos gastronómicos, de esa adevertencia que está haciendo últimamente, esos cerdos “industriales” que comen sin control alguno y que están alimentando con sus propias grasas y casquería (en forma de piensos) y que acabarán dando lugar a problemas tipo vacas locas.
Hubo muchos vinos, os podéis imaginar, yo elegí el Roda I 04 porque me parece el más redondo y elegante, hablo con Agustín Santaolaya, un amigo y enólogo de prestigio donde los haya.ç
Finalmente el producto de la feria: El arroz carnaroli Acquerello, un arroz italiano envejecido un año, más bien secado durante un año para que, cuando se ponga a cocer absorba absolutamente todo el sabor del caldo en el que se cuece, además de triplicar su tamaño. Lo pruebo y os lo cuento. Pero de entrada hablamos de él.