MI VIDA CON AMANDA
Título original: Amanda
Año: 2018
Duración: 107 minutos
País: Francia
Dirección: Mikhaël Hers
Guion: Maude Ameline y Mikhaël Hers
Música: Anton Sanko
Fotografía: Sébastien Buchmann
Reparto: Vincent Lacoste, Isaure Multrier, Stacy Martin, Ophélia Kolb Kasapoglu, Marianne Basler, Jonathan Cohen, Nabiha Akkari y Greta Scacchi
Productora: Nord-Ouest Production, arte France Cinéma, Pyramide Films, MK2 Films, Canal+, Ciné+, La Banque Postale Image, Sofica Manon 8, CNC, Région Languedoc-Roussillon-Midi Pyrénées
Género: Drama
Sinopsis: David es un joven de 20 años de París que se dedica a vivir el presente. Se gana la vida con pequeños trabajos, y evita tomar decisiones que le comprometan. Es solitario y soñador. Un día se enamora de Lena, una vecina que acaba de llegar. Pero el tranquilo transcurso de su vida estalla de pronto cuando su hermana mayor muere brutalmente en un atentado. David es la única persona que se puede hacer cargo de Amanda, su sobrina de siete años. (FilmAffinity)
‘Mi vida con Amanda’ es una película francesa muy pequeñita pero de las que desprenden mucha verdad. No recurre a ningún artificio ni ningún truco para provocar en el espectador sentimientos. Es una de estas películas que nacen desde dentro, una historia cotidiana que cautiva al espectador.
David (Vincent Lacoste) es un joven de 20 años que de la noche a la mañana se tiene que hacer cargo de su sobrina Amanda. Tras fallecer su hermana en un ataque terrorista en París, esta sobrina queda al cargo de él y de su tía, sus únicos familiares.
La historia que Mikhaël Hers plantea es tan sencilla de base que en apenas dos frases se puede resumir, pero esconde mucho más. Detrás de ella está la dificultad de una generación para encontrar estabilidad social, trabajo e ingresos, obligada a ejercer trabajuchos para sobrevivir. Y por otro lado, el gran tema de la cinta, la paternidad no buscada. Las consecuencias del duelo y la necesidad de cambiar todo tu plan de vida de un día para otro al quedar una persona a tu cargo. Un vuelco en la vida que reordena las prioridades de cualquiera.
Buena parte del éxito de ‘Mi vida con Amanda’ recae en los hombros de su dupla protagonista. Por un lado Vincent Lacoste que vuelve a reivindicarse como un actor muy solvente que lo mismo te hace drama que comedia, siempre con eficacia. Consigue que su personaje sea un hermano, un primo, un vecino o un amigo que todos tenemos y con el que podemos sentirnos identificados. Esa clase de personajes que a través de la pantalla quieres abrazar, acompañar y estar a su lado en su duro trabajo.
Junto a él está Isaure Multrier, una niña que demuestra su calidad dando la réplica a Lacoste. Su mirada es imposible que no toque la fibra sensible de cualquier espectador. Cautiva, emociona y rompe a partes iguales. Es cierto que tiene ciertas carencias de naturalidad en algunos momentos, pero son aspectos que irá puliendo a medida que gane experiencia. Pero la base es muy buena.
‘Mi vida con Amanda’ funciona como dramón del quince, pero sin recurrir al drama fácil y al momento lacrimógeno gratuito. Al contrario prefiere recurrir a momentos que van sumando esa carga dramática que explota de forma tímida al final, pero siempre con una sonrisa. Porque ‘Mi vida con Amanda’ no escapa de una visión luminosa de la adversidad. Incluso en el drama más grande hay opción de ver la luz al final del túnel.
Para los enamorados del cine francés, para ver una nueva interpretación de lujo de Vincent Lacoste o para emocionarse con una historia sencilla: ‘Mi vida con Amanda’.
Lo mejor: Su autenticidad.
Lo peor: Con el final desearás que siga todavía más.