TIEMPO DESPUÉS
Título original: Tiempo después
Año: 2018
Duración: 95 minutos
País: España
Dirección: José Luis Cuerda
Guion: José Luis Cuerda
Música: Lucio Godoy
Fotografía: Pau Esteve Birba
Reparto: Blanca Suárez, Roberto Álamo, Arturo Valls, Miguel Rellán, Carlos Areces,Antonio de la Torre, Joaquín Reyes, Raúl Cimas, Berto Romero, Nerea Camacho,Secun De La Rosa, Manolo Solo, Andreu Buenafuente, Gabino Diego, Eva Hache,Miguel Herrán, Iñaki Ardanaz, María Ballesteros, Pepe Ocio, Daniel Pérez Prada,César Sarachu, Javier Bódalo, Estefanía de los Santos, Martín Caparrós,Fernando González, Marcos Zan, María Caballero, Luis Pérezagua y Nacho López
Productora: Estela Films / Pólvora Films / Lanube Películas / El Terrat / Atresmedia Cine
Género: Comedia / Ciencia ficción
En el 9177, mil años arriba, mil años abajo -que tampoco hay que pillarse los dedos con estas minucias-, el mundo entero (y según algunos, el universo también) se ha visto reducido a un solo Edificio Representativo y a unas afueras cochambrosas habitadas por todos los parados y hambrientos del cosmos. Entre todos estos desgraciados está José María, un tipo que decide que salvando ciertas dificultades, y mediante la venta en el Edificio Representativo de una riquísima limonada que él mismo manufactura, otro mundo es posible. (FilmAffinity)
Hablar ahora de que ‘Amanece, que no es poco‘ es una de las grandes cimas de la comedia en España sería repetirse. La película que en los 80 firmó José Luis Cuerda es mítica por alguna razón, porque el público la ha encumbrado a ese Olimpo de comedias. Hay miles de personas que son fans de la película hasta tal nivel que son capaces de recitar sus diálogos enteros, y no son precisamente sencillos. Esa comedia absurda, en un pueblo de la Mancha, tiene secuela, pero miles de años después en ‘Tiempo después’.
A modo de “homenaje” de los comediantes actuales a los que hicieron en su momento ‘Amanece, que no es poco‘, Cuerda da el relevo generacional en una película que no se doblega a los tiempos actuales más que en la técnica y en la temática. Al contrario que aquella, ‘Tiempo después’ aborda de manera directa problemáticas sociales que vivimos en el día a día. Desde el paro al capitalismo, desde la democracia a la monarquía, desde la paz a la guerra, el mundo rural y el urbano… todo tiene su pequeño hueco en este edificio peculiar que es ‘Tiempo después’.
A diferencia de su hermana mayor, esto no es una sucesión de sketches costumbristas. Hay una trama central, los de abajo contra los de arriba, y viceversa. Se nos retrata la sociedad, sí, pero siguiendo una trama, sin renunciar al elemento cinematográfico. Uno de los parados (Roberto Álamo) pretende empezar a vender limonada. El hecho de que un parado empiece a trabajar implica que las cifras del paro se alteran, alterando el orden establecido y rompiendo con la estructura interna de esa mini sociedad formada en el edificio. Un asunto amoroso de por medio con Blanca Suárez, César Sarachu y Gabino Diego termina por estallar un conflicto bélico donde todos los habitantes del edificio se verán envueltos.
La premisa es ridícula, no podía ser de otra manera, pero es en los pequeños detalles que salpican cada una de las secuencias donde esta extraña comedia en estos tiempos alcanza su grandeza. El texto que recita el locutor (Andreu Buenafuente), las intervenciones del portero (Carlos Areces), la batalla entre los barberos (Arturo Valls y Berto Romero), los municipales (Joaquín Reyes y Raúl Cimas), el alcalde (Manolo Solo), los guardias civiles (Miguel Rellán y Daniel Pérez Prada)… no hay nada casual en esta cinta.
Tampoco faltan las referencias a ‘Amanece, que no es poco‘. La cantante de ópera, el pastor de ovejas, el clero obsesionado con el sexo, una Guardia Civil más dócil de lo que pudiera parecer, mandatarios mediocres, una juventud que no encuentra su sitio, los sudamericanos que van en bicicleta, las misas multitudinarias, los diálogos metafísicos… Los auténticos fans de ‘Amanece‘ se darán un festín encontrando las pildoritas que se van soltando durante la película para recordar a aquella.
Igual que ocurría con ‘Amanece, que no es poco‘, ‘Tiempo después’ está salpicada de continuos chistes, bromas, gags y gracias que no funcionan igual de bien. El espectador que vaya con intención de reírse de todos los chistes probablemente vivirá una experiencia no tan agradable. la película necesita varios visionados para dar con todos los detalles, por lo que si no te ríes de todo, no te preocupes. Incluso hay gracias que, aunque se agradece su tono políticamente incorrecto, son complicadas para poder reírlas en un primer momento. El momento del pastor preguntando a las chicas en la azotea “¿Ya dais leche como las ovejas?” pilla tan desprevenido al espectador que en un primer momento resulta hasta incómodo reír esta gracia. Y seguramente ninguna otra comedia actual se atrevería a hacer esta gracia, lo que todavía suma más puntos a favor de ella.
Solo el tiempo dirá si ‘Tiempo después’ se convierte en una comedia de culto como ‘Amanece, que no es poco‘. Una comedia extraña en estos tiempos que corren, necesaria y hecha para el uso y disfrute de una audiencia inteligente. Si todas las comedias españolas fueran así…
Lo mejor: Es una comedia que no envejecerá con el tiempo, tiene los elementos necesarios para engrandecerse y reivindicarla con el paso de los años.
Lo peor: Es imposible pillar todas las gracias, los guiños, los gestos y detalles a la primera, es una película que necesita de revisiones para poder admirar toda su grandeza.