De Murcia, además de verduras de la huerta, nos llega la monastrell, una de las uvas con más personalidad con que nos podemos encontrar en la península. Con grandes posibilidades de color, de aromas y de sabores frutales que, a veces, dejan a las demás temblando. Ha sido una de las uvas que más se han vendido a granel en el norte de Europa para hacer millones de litros de sangría embotellada. Seguro que han ganado mucho dinero pero se ha perdido mucho tiempo para los vinos de calidad.
Afortunadamente en Murcia una de las familias que mejor trabajan la uva monastrell es la familia Castaño. En Yecla desde hace mucho tiempo y embotellando desde los años 50 Ramón Castaño y sus hijos elbaoran vinos con mucha personalidad que no sólo se basan en esa uva sino en optras variedades que les permiten la D.O. y sus conocimientos de la tierra.
Presentan su Castaño colección 2004 con cepas viejas de monastrell y algo de cabernet con 4 meses de crianza en barrica. Sobre los 16 euros en supermercados es un vino realmente recomendable porque tiene toda la expresividad de la uva y la madera justa que no le tapa nada y que potencia sus sabores. Está en su momento.