‘Día de lluvia en Nueva York’: la última de Woody Allen en Estados Unidos
DÍA DE LLUVIA EN NUEVA YORK
Título original: A Rainy Day in New York
Año: 2019
Duración: 92 minutos
País: Estados Unidos
Dirección: Woody Allen
Guion: Woody Allen
Fotografía: Vittorio Storaro
Reparto: Timothée Chalamet, Elle Fanning, Selena Gomez, Jude Law, Diego Luna, Liev Schreiber, Annaleigh Ashford, Rebecca Hall, Cherry Jones, Will Rogers, Taylor Black, Kathryn Leigh Scott, Kelly Rohrbach, Edward James Hyland, Natasha Romanova, Suki Waterhouse, Griffin Newman, Claudette Lalí, Jacob Berger, Elijah Boothe, Dylan Prince, Olivia Boreham-Wing, Liz Celeste, Catherine LeFrere, Tyler Weaks, Chris Banks, Gurdeep Singh, Suzanne Smith, Geoff Schuppert, Deniz Demirer, George Aloi, Cole Matson, Marko Caka, Shannone Holt
Productora: Gravier Productions / Perdido Productions
Género: Romántico / Comedia
Sinopsis: Gatsby Welles y Ashleigh son una joven pareja enamorada de universitarios que se dispone a pasar un fin de semana en la ciudad de Nueva York. Ella va a entrevistar al reconocido cineasta Roland Pollard, que pasa por un momento de crisis creativa, y durante su azarosa aventura conocerá al cautivador actor Francisco Vega. Por su parte, Gatsby también conocerá a una joven, Chan, que le ayudará a poner en orden sus sentimientos. El lluvioso fin de semana estará plagado de encuentros, desencuentros y equívocos. (FilmAffinity)
Es inevitable hablar de ‘Día de lluvia en Nueva York’ mencionando el Me Too y el momento profesional por el que está pasando Woody Allen. Esta película, producida por Amazon, ha estado rodeada de polémica desde el pasado 2018, cuando se rodaba. El gigante de la distribución, también estudio de cine y televisión, se negó a estrenar la película en los Estados Unidos por la polémica en la que está envuelta Woody Allen.
A Allen se le acusa de abusar de su hija adoptiva Dylan Farrow. El director de cine ha sido absuelto hasta en dos ocasiones de estas acusaciones al no haber pruebas que corroboren lo que Dylan, Ronan y Mia Farrow afirman públicamente. En este conflicto, que ha coincidido en la época del Me Too y en pleno juicio a Havey Weinstein, la imagen de Woody Allen ha quedado tocada en Estados Unidos. Amazon fue demandado por Woody Allen por no estrenar la cinta, aunque el caso terminó cuando llegaron voluntariamente a un acuerdo.
En esta situación, Timothée Chalamet, Selena Gómez y Rebecca Hall, parte de la película, donaron sus sueldos a movimientos feministas y LGTBI. Otros miembros del equipo se han mostrado menos entusiasmados defendiendo a Allen, aunque sí que se han mostrado contrariados porque la película no se haya podido ver en los Estados Unidos. Y, mientras tanto, Woody Allen ha encontrado en Europa y, en particular, España, un refugio donde seguir haciendo cine el tiempo que le quede.
A colación de Timothée Chalamet y Woody Allen, se ha hecho popular en los últimos días un fragmento de las memorias de este último donde afirma que el rechazo del primero hacia él ha sido simplemente una estrategia de marketing para aumentar sus opciones de Óscar. Sin cuestionar para nada la versión de Allen, este movimiento del actor era todo menos sutil, me parece bastante lamentable que muchos periodistas ahora den validez a las declaraciones del director y no cuando cuenta su versión de los hechos en los casos por los que está acusado. ¿Creemos solo lo que nos interesa?
Pero volviendo a la película, o empezando con ella, ‘Día de lluvia en Nueva York’ es la historia de dos jóvenes universitarios que van a pasar un fin de semana a Nueva York. Ella (Elle Fanning) tendrá la oportunidad de entrevistar a un director de cine (Liev Schreiber) y de codearse con gente de Hollywood (Jude Law y Diego Luna). En cambio, él (Timothée Chalamet) tendrá que pasar el día improvisando planes por la apretada agenda de ella. Se reencontrará con viejos conocidos (Selena Gómez) y volverá a casa, un lugar al que no quiere volver.
La película es una comedia sencillita, fácil de seguir y muy amena. La estética de la ciudad, tantas veces capturada por Woody Allen, es uno de sus puntos fuertes. Así mismo, el juego de equívocos, segundas intenciones e historias cruzadas le termina de dar un punto interesante.
¿Es una gran película? No. ¿Está entre lo mejor de Woody Allen? No, aunque es de lo mejor que ha sacado últimamente. Pero es de estas películas que puedes ponerte una tarde y pasar un rato agradable con ella.
Lo mejor: Se ve muy fácil y no se hace pesada en ningún momento.
Lo peor: Que razones extracinematográficas hayan impedido su distribución.
